martes, 30 de diciembre de 2008

Este es el último post del año

No, era solo por aclararlo.

Postearía algo mañana solo por llevarme la contraria, pero me temo que voy a estar algo liado con los preparativos de la bacanal orgía pequeña fiesta que celebro en mi casa (serán bien recibidos todos los que vengan con bebida; en el caso de las mujeres esta condición es negociable).

Ale, feliz año a todos.

Y cuidadito con mezclar, que luego la resaca viene como viene.

jueves, 25 de diciembre de 2008

Felicitación navideña



No sabéis lo que me ha costado que el mono se ponga el dichoso traje de Santa, así que espero que sepáis perdonar el ligero retraso. Eso sí, la katana se ha negado a soltarla, el tío...

Pues nada, que feliz navidad a todos y que podáis disfrutar de estas fiestas con vuestros seres queridos viendo la mejor peli navideña de todos los tiempos: La jungla de cristal.

(¿Como que no es navideña? Pues suenan villancicos todo el rato... )

'Now I got a machine gun Ho-Ho-Ho'... ¿eso no es espíritu navideño? Bah, que sabréis vosotros...

domingo, 21 de diciembre de 2008

Penitencia

Seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré ms propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propiso consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis porpios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos,seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios consejos, seguiré mis propios cosnejos, seguiré mis propios consejos, seguiré...

viernes, 19 de diciembre de 2008

Advertencia navideña

Hoy me gustaría dar un mensaje a la humanidad. Bueno, a toda toda tampoco, pero no vamos a empezar ya poniendo pegas. En cualquier caso, seamos realistas, este mensaje me temo que solo va a llegar a la parte pequeñita de la humanidad que lee este blog. Bueno, lo que sea. La Dirección General de Tráfico advierte de que con motivo de las navidades el consumo de alcohol aumenta y que tenemos que tener precaución. Bueno, lo que pretende la DGT es que no se beba si se tiene que conducir, que me parece que tienen la batalla perdida desde el principio. Yo al menos recomendaría que si se conduce con media tajada se sea consciente de ello y se conduzca muy despacito y prestando mucha atención. Con eso yo ya me conformaba. Eso si, si la tajada es como un piano, casi mejor quedarse a dormirla en casa de alguien y evitar conducir. Lo mismo hasta matamos dos pájaros de un tiro (claro que según el nivel de borrachera, hay ciertas actividades físicas que no son recomendables, pero bueno, allá cada uno).

Yo iba a otra cosa. Hoy es el día de las comidas/cenas de empresa. Bueno, hoy y un poco mañana. Si amigos, hoy es ese día que estáis esperando todo el año para tirarle los trastos a la chica de contabilidad o al chico nuevo tan mono que no se sabe bien en que departamento trabaja. Un par de advertencias sobre esto: si bien es cierto que se concede que en estas ocasiones la moral se relaja un tanto y ciertas convenciones sociales se difuminan, es recomendable no beber como si lo fueran a prohibir para evitar hacer el ridículo monumentalmente como todos los años. En segundo lugar, y a pesar de lo dicho en la advertencia anterior, hay que tener en cuenta que también es una norma no escrita que todo lo que suceda en la cena no solo no quedará protegido por el secreto de sumario, si no que se convertirá automáticamente en comidilla, y alcanzará la máxima difusión en la empresa, que ya se encargarán los de siempre de distribuirlo y de inventarse lo que sea para rellenar los huecos. Esta advertencia se refiere especialmente (aunque no de manera exclusiva) a:

1) abrazar afectuosamente al director general al grito de '¡eres un dío de buda madre, goño!'.

2) subir a la mesa para hacer un brindis a grito pelado.

3) desafinar en el karaoke como un gato que está siendo desollado.

4) desaparecer sospechosamente con alguien deseable de cualquier sexo (que la gente es mu mala); si se desaparece en los servicios puntúa doble.

5) poner a parir al jefe de sección.

6) utilizar la fotocopiadora para fotocopiar cualquier cosa que no sean papeles; y ya me entendéis.

6) cualquier otra que la Comisión Permanente de Gente Sin Mejores Cosas Que Hacer pueda considerar criticable, punible y/o escandalosa.

Bueno, yo ya os he avisado. Ale, a cascarla.

Ah si, casi se me olvida. Que yo también me cojo una semanita de vacaciones -que no es que yo quiera, que yo estoy muy a gusto en el curro, que es que me la dan y queda feo decir que no- y como me retiro a mi base secreta que tiene una m**rd* de conexión, lo mismo estoy un tanto ausente de la red. Bueno, eso y que voy a estar borracho de aquí al dos de enero un tanto ocupado con lo de las navidades, y eso. Ale, portaros bien y no hagáis nada que yo no haría.

Ah si, y feliz navidad, que casi se me pasa.



Actualización después de la comida: ¡Os guiedo bogollón...! gue sois de buda badre dodos...

Actualización después de la cena: greo gue la he gojido buejgl --- ¡hics! bi se sus esti se ebtuebsi,,,

Advertencia: esta entrada no tiene foto; es que el mono se ha cogido día de asuntos propios y a mí me da pereza buscar una.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Deseos navideños

A propósito de nada, me gustaría explicar a los lectores habituales de este blog (unas tres personas, los demás que comentan soy yo mismo cambiándome de nick, ya aprovecho para decirlo) que el pasado viernes, después de tomar un misterioso liquido verde humeante al parecer perdí la consciencia. Se trataba de un tratamiento experimental que elimina los bloqueos creativos. A juzgar por el dolor de cabeza que he tenido hasta hoy, y por el aspecto de mi ropa cuando desperté, los efectos secundarios son todavía demasiado intensos para su comercialización. Quizás no debería haberlo probado precisamente durante la luna llena. La luna llena más grande del año, de hecho. Espero no haberme comido a nadie esta vez. Lo que sea.

En cualquier caso, aprovechando que me encuentro de un humor excelente y lleno de vitalidad, voy a hacer una entrada rebosante de espíritu navideño. Si amigos, las navidades se acercan discretamente, si -¿alguien ha dicho crisis?- pero llegarán finalmente y lo mejor que estemos preparados para ellas. Así que antes de que el espíritu navideño nos embargue y nos convierta a todos en un cruce entre el osito de mimosín y un teletubbie hasta el c*l* de éxtasis, voy a colgar mi lista deseos para navidad, a ver si hay suerte y alguien se anima. Por cierto, como lo de la paz mundial, que se acabe el hambre y que no se extingan más animales (bueno, si acaso las cucarachas) ya se da por supuesto, voy directamente a los deseos con sustancia. Vamos, lo que se dice la molla.

iPhone 3G

Si, ya se que dije que para escuchar música quería un iPod nano, pero es que también me hace falta un teléfono. No digáis que no dan ganas de matar a cualquiera que tenga uno para robárselo.


Macbook

Bueno, ya que hablamos de Apple, lo mismo me venía bien un portátil. Menos mal que no fabrican motos...


Yamaha V-max 2009

Vale, ya se que es un poco cara, pero es que ya que ha salido el tema de las motos... pues que esta me mola, y tal. Para los que no entiendan mucho del tema: efectivamente es una moto. Y una poco razonable, por cierto, doscientos caballos de nada. Pero mola todo. No es que tenga nada en contra de la Fat Boy (que por cierto, me gusta bastante), pero es que ésta es la moto que conduciría Terminator. Hasta el motorista fantasma podría conducirla. Mira, ya me estoy calentando...


Porsche GT3

Vale, reconozco que el alerón lo mismo es un poco excesivo, pero tendréis que reconocer que es una monada. Es que si tienes esto, ya ¿qué te pude faltar?



Leonor Watling

Que lo mismo viene alguien ahora y se piensa que la quiero para cualquier cosa. Que, noooo, que es que me gusta como canta. En serio. Qué pasa, no se puede escuchar solo AC/DC, ¿no?. Seguro que si los AC/DC la conocieran, también les molaba.

A ver... pues así a bote pronto, me parece que ya está todo.


A no, espera:



Ahora sí
que está todo: BWA-HA-HA... (risa maligna)



(Vale, me parece que ya se me está yendo la pinza otra vez, va a ser la medicina, que no se me ha pasado del todo)

viernes, 12 de diciembre de 2008

Cosas que puedes hacer para tocarme las bolas

Hoy no, porque me pillas de buenas, pero otro día, si me quieres sacar de mis casillas, puedes venir a mi ventanilla y hacer alguna de estas cosas.

1. Tráemelo todo grapado. 'Lo he grapado todo para que no se pierda'. Pues menos mal, porque cuando cerramos la ventanilla hacemos guerras de papeles, y luego es muy difícil saber con qué va cada cosa. Vamos a ver: a no ser que sea la primera vez que vengas por aquí (y eso no es lo habitual en mi ventanilla) sabrás que tengo que desgraparlo para escanear, pero tú no te preocupes. Si lo puedes grapar con grapa pequeña o con una de esas grapas que se abren hacia fuera, mucho mejor. Me encanta tener que quitar las grapas con las uñas.

2. Cuando te pregunte si traes copia, pon cara de '¿Yo? ¿Y para que iba a querer yo tener una copia?', y luego cuando te diga que ya he terminado y que te puedes ir pon cara de tremenda desolación y dime '¿entonces no me llevo nada?'. No, hoy no. Mañana a lo mejor me pillas con menos correa y todavía te vas calentito, pero hoy has tenido suerte. Mira si acaso te puedes llevar ese cartel que tienes delante de los morros y que hice yo mismo con ARIAL 48 en el que dice que aquí no se hacen copias. Y no es porque las pague yo, que conste, que a mí me da lo mismo. Si fuera por mí, esto sería una copistería. Pero es que no me dejan hacer copias ¿estamos?. Pues venga, circulando.

3. Ven viernes por la tarde. Vale, a lo mejor no trabajo mucho. Pero ES QUE NO ME GUSTA TRABAJAR. Si me gustara, lo mismo pagaba por hacerlo. Cuando llega el viernes, normalmente ya estoy hasta los h**v*s de aguantar gente como tú, así que déjame en paz y vuelve el lunes. Preguntar por alguien puntúa doble. Mira guapo, a las dos y media sonó la alarma de fusión del núcleo y la gente salió pitando mientras decían 'buen fin de semana'. Quedamos la de seguridad y yo, y ninguno de los dos estamos aquí porque nos apetezca. Además ella tiene pipa, así que tú verás. Si quieres verme reirme de verdad, encima pregunta por un jefe. Claro machote, aquí van a estar esperándote. No te j*d*.

4. Ven el último día del plazo. Esto me encanta. Que mira, si fueras tú solo, lo mismo me daba igual. Pero es contigo lo han hecho quinientos más. Que es que cuando se acaba un plazo ya estoy de mala leche desde que me levanto pensando que no voy voy a poder parar ni para mear. Seguro a todo el mundo le ha sido imposible venir antes de hoy. Claaaaarooo. De hecho ayer no vino ni dios. Se ve que estaban todos perdidos en medio de la selva tratando de regresar. Pues mira, ahora no te puedo atender yo ¿vale?. Y si tienes c*j*n*s, quéjate del rato que llevas haciendo cola, que ahí si que la vamos a tener.

5. Ven cuando haya cerrado, llama a la puerta y dí que si no te lo puedo coger, que solo han pasado 5 minutos. Vamos a ver. Cuando cerramos la ventanilla, aprovechamos para hacer otras cosas que no podemos hacer cuando está la ventanilla abierta. Yo personalmente acostumbro a quitarme toda la ropa y untarme de mantequilla. Por eso cerramos. Si llegas tarde, mala suerte. La próxima vez te levantas un poco antes, que tampoco hace daño.

6. No traigas un papel que tienes que presentar, pero encima dímelo. 'Me han dicho que tenía que traer el libro de familia, pero no lo traigo, ¿pasa algo?. Pues mira: a mí, no. A tí seguramente no te hagan ni p*t* caso, pero ese no es mi problema. Es que la gente tiene unos c*j*n*s...

7. Presenta algo fuera de plazo. 'Mira, da igual, ya que estoy aquí tú cógemelo'. Claro machote, se han presentado 450 para repartir 30 ayudas, y piensas que a lo mejor se emborrachan y te la dan justo a tí que llegas una semana tarde. Oye, todo puede ser, a mí me cogieron para trabajar aquí, o sea que muy listos no deben ser...

8. Trae algo que no tenga que coger yo, y encima inténtame convencer de que tienes razón porque crees que te sabes la Ley de procedimiento. Mira piltrafilla, cuando quieras hacemos hacemos una competición de ver quién la tiene más larga, porque a ver quién se sabe más la 30/92, es difícil que me ganes. Al menos el artículo que estás invocando, que no es por nada, pero lo has entendido completamente al revés. No pasa nada, todo el mundo puede equivocarse. Eso si, no te hagas el listo, porque para borde, yo. Por cierto, en lo de ver quien la tiene más larga tampoco creo que me ganes, pero no lo vas a saber porque no eres mi tipo.

Una variación de este tipo es "esto es para el 'centro internacional de loquesea con patatas' pero es que han cerrado ya, ¿me lo coges tú?". Según, ¿es algo que pueda comerme o vender?. En caso contrario, no. "Pero es que hoy era el último día, ¿ahora que hago?". Si quieres te puedo prestar mi DeLorean, pero el plutonio lo pones tú...

9. Pregúntame algo que no tengo por qué saber y luego pon cara de '¿y como no sabes eso?'. 'Me han convocado a una reunión, sabes donde tengo que ir'. Pues mira, no. Lo mismo si llamas al que te convocó, o a su secretaria, ellos puede que te puedan ayudar. Yo es que la bola de cristal me la he dejado en casa. 'Sabes donde es el congreso de lemonística trópica'. Pues así por el nombre, no; lo mismo se me la tarareas...

10. Dime que te mire ' a ver si está todo'. Vamos a ver. A mi me presentan unos doscientos papeles de doscientos temas distintos. Aunque soy muy listo -pero mucho, mucho- utilizo la mayor parte de mi intelecto para el mal, así que no me puedo saber de que va todo lo que hago. Se supone que lo tienes que saber tú, que para eso eres el que está pidiendo. Como mucho te puedo decir quién te puede informar. 'Vengo de allí, es que hay mucha cola'. Vale, tú si que te las has cargado. Voy a por la motosierra, no te muevas.

Y que conste que hoy tengo un día bueno bueno, que ni he tenido que sacar la recortada ni nada. Lo mismo parece que esté un poco serio, pero es porque el otoño me pone melancólico, nada más.

Se que todo esto no lo entenderá la gente que no trabaje de cara al público, pero la mayoría de la humanidad es basura . Sobre todo cuando es cliente. Yo no. Yo cuando soy cliente soy un amor. Más que nada porque he trabajado de casi todo y se lo coñazo que somos los demás.

Buen fin de semana.

Cagustomequedao, oyes.

jueves, 11 de diciembre de 2008

La chica del Este

Para esta semana tenía previsto subir al menos dos entradas, una de ellas complicadísima, y un dibujo espectacular completamente inédito. Por algún extraño motivo -seguramente algún tipo de maleficio- todo mi tiempo se ha ido por el desagüe sin que pudiera hacer nada para evitarlo. Como penitencia por mi informalidad cuelgo una de esas entradas larguísimas en las que al final quedo como un tonto. Esta en concreto la tenía a medio escribir desde octubre y la verdad es que no pensaba colgarla nunca.

Advertencia: por su contenido sexual, esta entrada puede no ser apropiada para menores de edad así como herir la sensibilidad algunos lectores, por lo que sería recomendable que al menos los más sensibles de ellos se la saltaran para evitar ofenderse innecesariamente. Pueden ocupar el tiempo revisando entradas antiguas o visitando otros sitios. En el blog de Jotace creo que están poniendo unos chistes muy buenos sobre Batman.

Que conste que soy consciente de que nadie ha hecho nunca caso de una advertencia así, pero al menos yo me quedo tranquilo. Es como decir "¡no mires!". Bueno, da igual. Ahora que os tengo a todos intrigadísimos, puedo empezar.


Aunque me gusta ir al gimnasio, la verdad es que hacía un tiempo que no iba. Tuve un resfriado bastante largo y luego estuve bastante liado con temas diversos. Y lo que pasa, cada día te da más pereza volver. Y eso que a mí el gimnasio me gusta, que no es que vaya por obligación. Pero es cierto que cuando pierdo el ritmo como que me cuesta un poco volver. Finalmente ayer me planté y a pesar de que no me apetecía nada decidí que tenía que ir costara lo que costase. Más que nada para coger el ritmo otra vez.

Por la mañana metí la bolsa de deportes en el maletero pero no tuve tiempo de revisarla, así que no estaba seguro de que estuviera todo dentro. Como ya conté una vez, no sería la primera vez que me tengo que volver porque me doy cuenta de que me he dejado la toalla en casa. Luego tuve un día perro en el trabajo, de esos que te dejan hecho polvo, así que cuando salí a por el coche después de mi jornada laboral, pensaba irme directamente a casa a tirarme en el sofá. Lo que pasa es que por el camino me empezó a remorder la conciencia y terminé cambiando de idea.

Aquí tengo que dar un par de explicaciones. En primer lugar, no me gusta abrir el maletero para guardar algo cuando aparco el coche. Puede parecer raro, pero es que ya me lo han abierto un par de veces, así que prefiero que no me vean guardando nada. Por este motivo, cuando planeo ir al gimnasio lo que hago antes de arrancar el coche es dejar la mochila, bandolera o lo que lleve -y siempre llevo algo- en el maletero y sacar la bolsa de deportes para dejarla ya preparada en el asiento trasero. De esta manera, cuando llego al gimnasio no tengo que abrir el maletero para que los malos (que están siempre acechando) no me vean dejando la cartera, las tarjetas y todo lo demás indefenso y a su disposición durante una hora o más.

La segunda explicación es que no vivo en la misma población en la que trabajo, así que el gimnasio me lo busqué en una tercera población, a medio camino de las dos, para que me pillara de paso. El gimnasio está en las afueras del pueblo junto un polígono industrial y muy cerca de la carretera por la que voy a mi casa, lo que me pilla bastante bien. Explicado todo esto, ya puedo seguir con el hilo de mi historia.

Como decía, decidí ir al gimnasio sobre la marcha, así que me había dejado la bolsa en el maletero e iba a tener que cogerla. Además me estaba empezando a dar mal rollo no haber repasado la bolsa al salir de casa, y sabía que me iba a dar muchísima rabia ir al gimnasio con las pocas ganas que tenía y luego tener que volverme porque me había dejado algo. 'No pasa nada', pensé 'me paro en algún sitio antes de llegar y lo reviso todo y ya la dejo en el asiento de atrás'. Bueno, no se si me lo expliqué tanto, yo lo pongo así para que se entienda. Finalmente paré el coche en el polígono industrial que hay justo antes de llegar al gimnasio.

Justo cuando estoy saliendo del coche reparo en que desde lejos se acercaba hacia mi una chica vestida más o menos como Emma Frost pero con menos ropa. Que yo, que soy muy despierto, pensé, o se celebra por aquí un salón del cómic y yo no me he enterado o esto es una puta prostituta ramera ...ehmmm señorita que ejerce el oficio más antiguo del mundo (y no me refiero a la cetrería). Que no es que me importara, pero reconozco que ha veces tengo problemas para rechazar educadamente ofertas de comerciales agresivos, y el marketing de estas chicas está casi al nivel de los que ofrecen tarjetas de crédito en los centros comerciales. Bueno, eso y que soy un chico tímido y los ofrecimientos sexuales muy directos todavía me hacen sonrojarme, para qué nos vamos a engañar.

Todo este post no ha sido más que una excusa para poder colgar esta imagen. Ya que que Adam Hughes no necesita excusas, pero yo soy así.

Traté de acabar lo que estaba haciendo lo más rápidamente posible para evitar en la medida de lo posible malentendidos con la chica, pero la verdad es que con los nervios no sabía ni lo que me hacía, así que finalmente la chica me alcanzó. Mis esperanzas de que pasara de largo sin advertir mi presencia se desvanecieron en cuanto sentí una cariñosa palmada en el culo. Cuando levanté la vista del maletero me pareció que incluso se parecía a Emma Frost. Debieron ser imaginaciones mías, porque en realidad se trataba de la típica chica del este. Rusia debe de ser como esos planetas de los cómics de ciencia ficción antiguos donde los hombres son todos como Boris Yeltsin mientras que las chicas son todas rubias de metro ochenta con ojos azules. O al menos eso parece en las películas. Me ofreció educadamente sus servicios con un notable dominio del castellano: '¿Tú? ¿Follar? ¿Sí?'. No se puede decir más con menos. Tengo que decir que en principio no tengo nada en contra de la prostitución, pero a mí el sexo me deja de hacer gracia en cuanto tengo que pagar por él. Llámame raro, pero pensar en él como una transacción comercial, hace que pierda todo el interés para mí. Bueno, eso y el hecho de que siempre que veo una chica en la calle pienso '¿y dónde ducharán entre cliente y cliente?'. Vale, en realidad no quiero saber la respuesta. Aunque en este caso era aplicable porque obviamente esta chica estaba empezando su jornada (y prontísimo además, la verdad es que no sabía que empezaran tan de día). Por cierto con un ímpetu envidiable, yo hasta que no me tomo un café y llevo un rato mirando el monitor soy incapaz de nada productivo. Pero estoy divagando.

-Huy no, gracias, es que me tengo que ir al gimnasio -dije señalando la bolsa de deportes mientras pensaba 'si le estoy diciendo que prefiero montarme en una bicicleta estática antes que acostarme con ella lo mismo la estoy ofendiendo un poquito; igual le tenía que haber dicho que no tengo dinero'.

-¿Y gratis? -me contestó la única puta del mundo con la capacidad de leer la mente.

Por un momento se me pasó por la cabeza: 'mira, como Preti Güoman, pero al revés'. Aquí me gustaría decir que le contesté 'si estás intentando regatear, te advierto que lo haces fatal', pero la verdad es que creo que sufrí un cortocircuito cerebral y me limité a mirarla con cara de 'no, en serio, tengo que ir al gimnasio, todo el equilibrio del universo puede depender de ello'. Supongo que conocéis la cara, es la misma que pones cuando te invitan a una fiesta que tiene pinta de ser muy divertida y resulta que tú ya has quedado con alguien a quien tienes que ver por compromiso.

La chica se encogió de hombros con cara de incredulidad y continuó hasta la esquina, donde se plantó a esperar que pasara algún conductor con ganas de generar endorfinas de una manera más sencilla.

Ya en el gimnasio, mientras trataba de terminar mi última serie de abdominales, pensaba que seguramente en un universo paralelo, una versión más despierta de mi mismo le había preguntado a la chica si le estaba tomando el pelo como sospechaba, aunque solo fuera por asegurarse.

Claro, que seguramente en ese universo, esa versión de mí se habría perdido una estupenda sesión de abdominales.




PD: Que conste que en realidad se que no iba en serio. De todas maneras si sirvió para que una chica con el peor trabajo del mundo se riera de mí al ver la cara de tonto que ponía, me parece que ya sirvió para algo.

Por cierto, en esta entrada no he puesto asteriscos en los tacos porque no me ha dado tiempo. Si alguien se los quiere colocar, aquí le dejo unos cuantos: **************. Huy mira, si es mi contraseña de correo.

martes, 2 de diciembre de 2008

Confesiones : Yo fui el vaquilla

Hoy (bueno vale, en realidad fue ayer) pensaba colocar una entrada que recordaba haber dejado preparada hace bastante tiempo y que por lo que sea me apetecía colgar. Pues resulta que cuando he ido a buscarla, no estaba. ¿A dónde van las entradas que desaparecen?. ¿A la zona negativa?. Lo que sea. El caso es que ya me había hecho a la idea de contarla, así que voy a tener que currármela.

Ya conté hace tiempo -y si alguien no recuerda aquella divertida historia, la puede leer aquí- que yo tuve una época en la que tenía pinta de macarra podía parecer macarra a un ojo poco entrenado, pero en realidad era todo un ejemplo de estilo, y conducía un seat 124. Lo que voy a contar es algo anterior, cuando todavía no tenía carnet ni pelo largo. Entonces solo tenía una novia a la que no le gustaba conducir. De hecho me parece que el sentimiento era mutuo. Quiero decir, que a la conducción tampoco le debía de gustar ella, porque se sacó el carnet a la octava. Cuando fui con ella la primera vez entendí las dos cosas de repente. Es decir, que tardara tanto en sacarse el carnet, y que el examinador finalmente en un arranque de apego por la vida, decidiera aprobarla para no tener que ir más en el coche con ella. Es que era toda una experiencia.

En este estado de cosas, cuando un día ella decidió llevarme a la playa, siendo todavía de día, sospeche que no me llevaba para lo de siempre. Lo que no me imaginaba era que sus intenciones eran casi peores: pensaba enseñarme a conducir.

Tengo que decir que lo de conducir me gustó desde el principio casi tanto como la otra cosa que solía hacer con ella también en el coche (y de la que no daré más detalles por pudor). Y parecía darseme bien, porque en cuanto me acostumbré al embrague ya era capaz de manejar el coche al menos con la misma habilidad que cualquier novato. Y de hecho creo que mejor que ella. Esto me parece que al principio le molestó un poco, pero en seguida le vió una utilidad práctica.

No se lo que tardó en hacerse habitual que condujera yo, pero si que sé que todos los domingos nos dejaba el coche su padre, y que durante un año la mayoría de las veces lo conduje yo. Algunas veces incluso mi madre me dejaba su coche. Ella sabía que yo no tenía carnet, pero claro, tampoco pensaba que lo fuera a conducir yo. A fin de cuenta mi novia si que tenía. Ya se que todo esto parece ahora muy escandaloso, pero si os váis a escandalizar con cada cosa ilegal o inmoral que he hecho... supongo que era joven y no me daba cuenta de lo que hacía. Además, teniendo en cuenta como conducía mi novia, creo que me sentía más seguro llevando el coche yo mismo, aunque fuera ilegalmente. Bueno vale, prometo no volver a conducir sin carnet, ¿de acuerdo?.

Tengo que decir en mi defensa que en todo el tiempo que estuve conduciendo sin carnet no tuve el menor percance. Y que el destino no está carente de ironía, como veremos.

Un día llegué a la conclusión de que alguna vez en el futuro quizás fuera a necesitar el cartoncito rosa ese, y decidí apuntarme a una autoescuela. La verdad es que no me costó mucho sacármelo. De hecho el práctico me lo saqué a la primera y con el mínimo de prácticas que me dejaron contratar (cinco). El profesor el primer día me dijo que iba un poco rápido. 'No te j*d*-pensé- es que yo conduzco como la gente de verdad'. Dicen que cuesta quitarte los vicios de haber conducido antes, pero yo lo único que me tuve que acostumbrarme a hacer es reducir -que es algo que en la vida real no hace nadie- y a frenar cuando está ámbar, porque lo de derrapar en las curvas ya me imaginaba que no daba más puntos.

El día que obtuve el carnet, ni siquiera conduje. 'A partir de ahora vamos a hacer las cosas bien', le dije a mi novia. Fui andando a la autoescuela a por él, y a la vuelta cogí el coche de mi madre para conducirlo, por primera vez, legalmente.

A los cien metros de haber arrancado, tratando de sortear un contenedor de obra que estaba en mi carril, me arranqué casi completamente una de las puertas del coche. Cuando me bajé casi me pareció que el contenedor se estaba aguantando la risa...


Supongo que esta historia tiene moraleja, pero si no es 'conducir con carnet es más peligroso' no tengo ni idea de cuál puede ser.

PD: Hoy no hay foto, que le he dado libre al mono. A ver si mañana le pido que me ponga alguna...

Minutos musicales

Por motivos del todo ajenos a la dirección de este blog -llámale realizar actividades del todo aburridas y sin sentido, llámale trabajo... pero me pagan por hacerlo, así que no tengo salida- la entrada que estaba prevista para su publicación se va a retrasar un poquito.

Mientras tratamos de solucionar la incidencia -léase: cargarle el muerto a otro- les dejamos con unos minutos musicales.



Kid Rock: All Summer Long (Rock'n'Roll Jesus, 2008)